Se retrasa la audiencia de nueva sentencia de los hermanos Menéndez tras dramático día en tribunales
LOS ÁNGELES (KABC) -- La tan esperada audiencia de resentencia de Erik y Lyle Menéndez, celebrada el jueves, se pospuso después de que los abogados de ambas partes se reunieran con el juez a puerta cerrada tras una acalorada y polémica audiencia con altercados, mientras los hermanos buscan una oportunidad de libertad.
El abogado de los hermanos, Mark Geragos, y el fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, Nathan Hochman, se reunieron con el juez Michael Jesic a puerta cerrada tras un receso judicial. Tras unos minutos, Geragos regresó a la sala e indicó a su equipo que salieran. Varios familiares de los hermanos Menéndez también salieron.
Según Geragos, la oficina del gobernador había autorizado al juez a solicitar los informes de evaluación de riesgos de la junta de libertad condicional.
En un documento presentado el miércoles por la noche, los fiscales instaron al tribunal a obtener una copia de una evaluación de riesgos recientemente completada, realizada a los hermanos por la Junta de Audiencias de Libertad Condicional de California a petición del gobernador Gavin Newsom.
La presentación de la oficina del fiscal de distrito instó al juez a retrasar la sentencia si el tribunal no podía obtener una copia del informe a tiempo para la audiencia.
Se programó una audiencia para discutir la admisibilidad de los informes de evaluación de riesgos de la junta de libertad condicional para el 9 de mayo. En dicha audiencia, se espera que Geragos presente una moción para recusar al fiscal del distrito y a su equipo del caso Menéndez.
No quedó claro de inmediato cuándo se presentaría la nueva sentencia ante el juez.
Geragos habló con la prensa ante el tribunal el jueves y calificó el intento de último minuto de Hochman de retrasar la audiencia de nueva sentencia como un "Ave María".
Durante la audiencia del jueves, la fiscalía argumentó persistentemente que la evaluación de riesgos completada es relevante.
Geragos calificó el intento de la fiscalía de "una farsa". La fiscalía respondió al juez, diciendo que los comentarios de Geragos eran degradantes, tras lo cual Geragos exclamó: "¡Tu debería ser degradado!".
El juez Jesic pareció molesto por la disputa y dijo que necesitaba más información sobre el informe de evaluación de riesgos de la oficina del gobernador y cómo podría ser utilizado por el tribunal.
Jesic dijo que necesitaba una aclaración de la oficina del gobernador, porque esto es una tontería.
Los hermanos -- que cumplen cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por los asesinatos en 1989 de sus padres, José y Kitty Menéndez -- luchan por ser puestos en libertad tras 35 años entre rejas.
Si el tribunal decide seguir adelante con la audiencia de revisión de sentencia del jueves, un juez decidirá si merecen la libertad. Según ha podido saber ABC News, diez miembros de la familia están dispuestos a subir al estrado en la vista, mientras que un experto en prisiones y un antiguo recluso también podrían testificar.
El viernes, Lyle y Erik Menendez tuvieron una gran victoria en los tribunales cuando el juez falló a su favor en una audiencia sobre la moción del fiscal Nathan Hochman para retirar la petición de resentencia presentada por el anterior fiscal, George Gascón, quien apoyó la resentencia y la liberación de los hermanos.
En el alegato del fiscal, que duró tres horas el viernes, argumentó que los hermanos -- que estaban escuchando la vista por vídeo -- no han asumido la responsabilidad de sus actos y calificó sus alegaciones de defensa propia como parte de una letanía de "mentiras". Hochman también rechazó la afirmación de los hermanos de que sufrieron abusos sexuales por parte de su padre.
El abogado de Menéndez, Mark Geragos, respondió llamando a Hochman "neandertal de los 90" por negarse a creer a los hermanos.
El juez denegó el viernes la moción de Hochman de retirarse y dijo que la audiencia de resentencia de los hermanos procederá como estaba previsto este jueves y viernes.
Geragos calificó la decisión como "probablemente el día más importante desde que están detenidos".
"Han esperado mucho tiempo para obtener algo de justicia", dijo.
Hochman dijo en un comunicado después de la sentencia: "Llegamos a la conclusión de que el caso no estaba maduro para una nueva sentencia sobre la base de la continua incapacidad de los hermanos Menéndez para mostrar plena comprensión y aceptar la responsabilidad completa de toda la gama de sus acciones criminales y encubrimiento, incluyendo las fabricaciones de su defensa propia y sus mentiras acerca de que su padre era un violador violento, su madre una envenenadora, y su intento de obtener un arma de fuego para defensa propia el día antes del asesinato."
"Hasta que los hermanos Menéndez no aclaren por fin todas sus mentiras sobre la autodefensa y el soborno e intento de soborno de perjurio, no estarán rehabilitados y supondrán un riesgo irrazonable de peligro para la seguridad pública", afirmó.
Este posible camino hacia la libertad cobró impulso en octubre, cuando el predecesor de Hochman, Gascón, anunció que apoyaba la resentencia.
Gascón recomendó que se eliminaran sus condenas a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional y dijo que, en su lugar, deberían ser condenados por asesinato, lo que supondría una pena de 50 años a cadena perpetua. Dado que ambos hermanos tenían menos de 26 años en el momento de los crímenes, con la nueva sentencia podrían optar inmediatamente a la libertad condicional.
La oficina de Gascón dijo que sus recomendaciones de resentencia tienen en cuenta muchos factores, incluida la rehabilitación en prisión y los abusos o traumas que contribuyeron al crimen. Gascón, que perdió su intento de reelección frente a Hochman en noviembre, elogió el trabajo que Lyle y Erik Menéndez hicieron entre rejas para rehabilitarse y ayudar a otros reclusos.
Más de 20 familiares de los Menéndez apoyan la puesta en libertad de los hermanos. Varios de esos familiares hablaron con ABC News la semana pasada, entre ellos la prima Diane VanderMolen, quien dijo que Erik Menéndez le pidió que transmitiera un mensaje.
"Están muy, muy arrepentidos de lo que hicieron. Y están profundamente arrepentidos", dijo VanderMolen. "Están llenos de remordimientos por lo que hicieron. Y gracias a eso, se han convertido en personas muy notables".
Además de la nueva sentencia, los hermanos tienen otros dos posibles caminos hacia la libertad.
Una es su petición de clemencia al gobernador de California, Gavin Newsom.
Newsom anunció en febrero que iba a ordenar a la junta de libertad condicional que llevara a cabo una investigación de 90 días de "evaluación exhaustiva de riesgos" para determinar si Lyle y Erik Menéndez suponen un riesgo irrazonable para el público en caso de que se les conceda el indulto y sean puestos en libertad.
Tras la evaluación de riesgos, que según Hochman ya se ha completado, Newsom dijo que los hermanos comparecerán en audiencias independientes de la junta de libertad condicional en junio.
La otra vía es la petición de hábeas corpus de los hermanos, que presentaron en 2023 para que se revisaran dos nuevas pruebas no presentadas en el juicio: una carta que Erik Menéndez escribió a su primo ocho meses antes de los asesinatos en la que detallaba los supuestos abusos de su padre, y las alegaciones de un antiguo miembro de una banda de chicos que reveló en 2023 que fue violado por José Menéndez.
En febrero, Hochman anunció que iba a pedir al tribunal que denegara la petición de hábeas corpus, argumentando que las nuevas pruebas de los hermanos no eran creíbles ni admisibles.
