Leroy Ernest Joseph McCrary, de 26 años, de Los Ángeles, Malachi Eddward Darnell, de 18 años, de Los Ángeles, y Jaden Cunningham, de 18 años, de Lancaster, "son elegibles para la pena de muerte si son declarados culpables del asesinato en circunstancias especiales de Patricia McKay, de 68 años, en la comisión de un robo con un aumento de delito grave de causar la muerte de una persona mayor de 65 años", dijo la oficina del fiscal de distrito del condado de Orange en un comunicado de prensa.
Además del cargo de asesinato en circunstancias especiales, McCrary ha sido acusado de un delito grave de intento de robo en segundo grado, y un delito grave de evasión mientras conducía imprudentemente. McCrary tiene condenas previas por delitos graves por robo residencial en 2018, amenazas criminales en 2020 y robo en 2023, todos en el condado de Los Ángeles, dice el comunicado.
Darnell también ha sido acusado de un cargo de delito grave de intento de robo en segundo grado, un cargo de delito grave de intento de asesinato y un aumento de delito grave de uso personal de un arma de fuego y un aumento de delito grave de descarga personal de un arma de fuego, dijo la oficina del fiscal. Cunningham también ha sido acusado de un delito grave de intento de robo en segundo grado.
"Las acciones tienen consecuencias y no debería tener que resultar en la muerte de una mujer mayor que sólo disfrutaba de un día de compras con su marido para que nuestros líderes electos en Sacramento se den cuenta de que esto es el producto de sus políticas blandas contra el crimen que fomentan la criminalidad mientras sacrifican la seguridad pública", añadió Spitzer. "Esto es el Condado de Orange y nos negamos a aceptar que esto sea la nueva normalidad".
Según la policía y los fiscales, Darnell y Cunningham, ambos con máscaras, se acercaron a McKay y a su marido cuando caminaban por el exterior de la tienda Barnes & Noble de Fashion Island.
Uno de los sospechosos puso una pistola en la cabeza del marido de McKay, de 69 años, y le exigió su reloj mientras le obligaba a tirarse al suelo, según la fiscalía. Cuando no pudieron conseguir el reloj, los sospechosos supuestamente dirigieron su atención hacia McKay, que llevaba en la mano varias bolsas de compra.
Cunningham está acusado de arrastrar a McKay a la calle delante de un vehículo de huida conducido por McCrary.
Según la fiscalía, el marido de McKay saltó delante del vehículo en un intento de proteger a su esposa, pero McCrary, con Darnell de nuevo en el vehículo, aceleró y obligó al marido a quitarse de en medio, y luego atropelló a McKay, atrapándola bajo el vehículo y arrastrándola 65 pies.
Fue declarada muerta en el lugar de los hechos.
Cunningham seguía a pie y corría hacia el vehículo en marcha, perseguido por un buen samaritano, lo que llevó a Darnell a efectuar varios disparos desde el interior del vehículo hacia el que lo perseguía. Los disparos no alcanzaron a nadie.
Finalmente, Cunningham subió al vehículo y el trío se dio a la fuga.
Los sospechosos condujeron a las autoridades en una persecución por la autopista 405 hacia el norte. Durante la persecución, el conductor se detuvo en la zona de Cypress, y Cunningham saltó del vehículo, pero fue detenido más tarde, dijo la fiscalía. Los otros dos sospechosos continuaron la persecución hasta South Gate, donde ambos fueron detenidos.
El marido de McKay no resultó herido de gravedad durante el robo, según la policía.
City News Service contribuyó a este informe.