Estudios realizados anteriormente demuestran que el uso de la tecnología a la hora de dormir aumenta la ansiedad, la dependencia e incluso puede afectar el funcionamiento ejecutivo. Ahora, hay mas pruebas que respaldan los efectos perjudiciales de los periodos nocturnos y el llamado "scroll de la perdición".
Jesse Kohn, un estudiante de Universidad de Chapman que también dirige su propia empresa, cree que podría ser adicto a su teléfono. Lo busca constantemente.
"Enviando ese último correo electrónico, ese último pedido a Amazon", dijo.
Su pequeña empresa asesora a jóvenes bailarines y les ofrece una plataforma para mostrar su talento. Su agenda está repleta y a veces, Kohn se salta el sueño y termina su día viendo TikTok.
"Simplemente no puedes irte a dormir", dijo. "Tienes que ir a TikTok primero, como, así es como va".
La psiquiatra, Doctora Evita Limón-Rocha con Kaiser Permanente Riverside dijo que Khon no está solo.
"Nueve de cada 10 estadounidenses en realidad están usando su teléfono celular dentro de una hora de quedarse dormido", dijo.
Según un estudio del Journal of Adolescent Health, el uso de la tecnología, y en concreto de los teléfonos móviles cerca de la hora de acostarse reduce la calidad y la duración del sueño.
Uno de cada cinco adolescentes se despiertan a la mitad de la noche y consultan su teléfono.
"Se nos presenta la información como nunca se nos había presentado", afirmó Limón-Rocha.
No todo es inofensivo.
Los niños y adolescentes pueden verse expuesto a noticias inquietantes o sucesos traumáticos. Pasar tiempo en el teléfono implica menos conexión con la vida real, lo que afecta la salud mental.
Según Limón-Rocha, en todo el país se está observando un aumento de la ansiedad y la depresión, y además del impacto emocional en el sueño, los estudios documentan el impacto físico.
"La luz de ese aparato también puede enviar señales a nuestro cerebro y confundirlo para que este despierto", explicó Limón-Rocha.
Además de afectar al juicio y las habilidades motoras, dormir mal puede sabotear el rendimiento académico porque interfiere en la capacidad del cerebro para memorizar y comprender.
"Nuestra capacidad para responder preguntas, leer lo que dice la pregunta y comprender", explico Limón-Rocha.
Las investigaciones demuestran que los niños duermen más si cargan el celular fuera del dormitorio, lo ponen en el otro lado de la habitación o lo apagan completamente en lugar de silenciarlo. Además, los expertos sugieren crear un ritual para irse con calma.
"Centrémonos en rutinas que sepamos que pueden ayudarnos a prepararnos para ir a la cama, ya sea una ducha caliento, o un vaso de té o meditación", dijo Limón-Rocha.
Para personalidades de tipo A como Kohn que necesitan hacer muchas cosas, la doctora Limón-Rocha recomienda un temporizador de TikTok para que un vistazo rápido no se convierta en una o dos horas.