Al sur de México, en Campeche se encuentra Pomuch, un sitio húmedo que en Maya significa lugar donde se asolean los sapos.
En ese estado, también se elaboran ofrendas. Sin embargo, algo que destaca a ese pueblo a comparación a los demás, es la limpieza de los santos restos.
A partir del 31 de octubre, la comunidad de Pomuch visita las tumbas de sus seres queridos.
Después de pasar tres años de haber partido un ser querido y haber sido enterrado, los restos son exhumados. Entonces, los seres queridos del difunto no solo limpian sus tumbas, sino también sus huesos.
Esta tradición suele ser peculiar para algunos, pero para ellos es una tradición que ha trascendido de sus antepasados. Una tradición que ha estado en práctica ya por varios siglos.
Los restos son limpiados cautelosamente con una brocha y después son transferidos a una caja dentro de un paño blanco.
Durante la temporada de Día de Muertos, el cementerio es un centro turístico donde foráneos pueden apreciar de una distinta tradición de muertos que aún sigue viva.