Esperaba visitar Jamaica, de donde era su padre, y ya había preparado su pasaporte.
Su último día de trabajo fue el viernes 30 de agosto.
Al día siguiente, James murió atropellado por una conductora presuntamente ebria cuando salía de la entrada de la casa de un amigo en Crenshaw Boulevard, en Hyde Park.
"Estamos destrozados", dice su hermana, Alicia James.
La policía de Los Ángeles dice que la mujer que conducía -Viniesha Horsley, de 23 años- está siendo investigada por exceso de velocidad y consumo de alcohol.
Alicia dice que su hermano era un espíritu alegre, el alma de la fiesta y un bailarín que estaba deseando jubilarse.
"Le hacía tanta ilusión jubilarse... que quería irse a Jamaica. Mi padre era jamaicano y él nunca había ido, así que era su sueño. Ya tenía el pasaporte preparado".
Por desgracia, la familia James no es ajena a la tragedia.
El hijo de Tony, Reggie James, de 19 años, fue asesinado a tiros hace tres años cuando se encontraba junto a un camión de tacos en el centro de Los Ángeles. La policía aún no tiene un sospechoso.
Horsley fue fichado por homicidio vehicular y conducir bajo la influencia. Pero en lugar de ser procesada, fue puesta en libertad y el caso se devolvió a las fuerzas del orden para que siguieran investigando.
Eso fue un paso atrás de lo que la familia esperaba.
"Mi hermano murió por su culpa", dijo Alicia James. "Sólo quiero que se haga justicia".