Prince King se declaró inocente el martes de varios cargos de vandalismo y quedó en libertad condicional. Se le ordenó permanecer a 200 metros de las viviendas afectadas y no ponerse en contacto con las presuntas víctimas.
King falleció el miércoles en una residencia privada, según el Médico Forense del condado de Los Ángeles. Se desconoce la causa de su muerte.
King fue acusado de utilizar una resortera para disparar bolas de acero contra las casas y vehículos de sus vecinos, rompiendo ventanas y parabrisas durante un periodo de al menos nueve años.
Los abogados de King dijeron que padecía de varias enfermedades, entre ellas una afección cardiaca y un problema nervioso en la pierna y la espalda. Se le permitió ir a casa a recoger los medicamentos.
Se le ordenó no poseer armas mortales, incluyendo resorteras.
En el momento de su muerte, estaba previsto que volviera a comparecer ante una corte el 17 de junio para una audiencia preliminar.