El fiscal de distrito del condado de Riverside confirmó que presentó cargos contra el sospechoso, Jesse Navarro, de 43 años, incluyendo un cargo de asesinato en primer grado, un cargo de intento de asesinato, cargos especiales relacionados con armas de fuego y la circunstancia especial de asesinato de un oficial de la ley.
La circunstancia especial hace que Navarro sea elegible para la pena de muerte si es declarado culpable, aunque el fiscal de distrito Mike Hestrin aún no ha tomado una decisión sobre si buscar esa sentencia. Además, el gobernador Gavin Newsom ordenó desde 2019 una moratoria sobre la pena de muerte en California.
Calhoun fue el primer agente del alguacil en la escena que respondió a una llamada de violencia doméstica en la casa de Navarro en la comunidad de Lakeland Village, cerca de Lake Elsinore, el 13 de enero.
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Los investigadores dicen que Navarro le disparó a Calhoun varias veces poco después de su llegada.
Un segundo agente del alguacil pronto llegó, encontró a Calhoun con heridas de bala en la calle y le disparó a Navarro hiriéndolo.
Navarro permanece bajo atención médica por esas heridas y aún no ha sido fichado en la cárcel ni procesado.
Calhoun era un padre casado de dos hijos, con un tercer hijo en camino. Su familia es propietaria del popular restaurante Calhoun Family Texas BBQ en Murrieta.
Este fue el segundo asesinato de un agente del alguacil del condado de Riverside en cuestión de semanas.
A fines de diciembre, el agente del alguacil Isaías Cordero fue asesinado a tiros en un encuentro con un delincuente que tenía un extenso historial criminal. El sospechoso en ese incidente murió en un tiroteo con otros agentes tras una persecución policial.
El video en el reproductor de arriba es de un informe anterior.