Aficionados recuerdan a Fernando Valenzuela, icono de los Dodgers, el día de su cumpleaños
LOS ÁNGELES (KABC) -- Los Dodgers celebraron su desfile del campeonato el viernes en el que habría sido el 64 cumpleaños de Fernando Valenzuela.
Valenzuela, ex lanzador de origen mexicano se convirtió en un icono de la franquicia y ayudó a transformar la afición, murió el martes pasado. Su presencia fue muy importante durante la carrera de los Dodgers en la Serie Mundial de 2024.
Fue homenajeado antes del primer juego de la Serie Mundial. Antes del segundo partido, el rapero Ice Cube declaró una victoria en su nombre.
Valenzuela desató el "Fernandomanía" en 1981 y ganó el premio Cy Young de la Liga Nacional y el de Novato del Año. Terminó el año ayudando a los Dodgers a vencer a los Yankees en la Serie Mundial.
"Recuerdo 'Fernandomanía' del 81'. Fui parte de esa celebración y de ese año emocionante. Fue entonces cuando me enamoré del equipo, así que perder a un icono - una leyenda como él - fue duro para los aficionados de los Dodgers", dijo el aficionado Martin Duran a ABC7 en el desfile del viernes.
La llegada de Valenzuela se produjo décadas después del desplazamiento de familias mexicano-americanas en Chavez Ravine.
"Antes de Fernando, había una relación ambivalente entre los aficionados latinos y la organización de los Dodgers, así que lo que hizo Fernando Valenzuela fue tender un puente sobre esa brecha", añadió Duran.
Valenzuela convirtió a Teresa Ramírez en aficionada del béisbol. Acaba de cumplir 75 años y recordó cómo caminó desde Boyle Heights hasta el estadio de los Dodgers durante una huelga de autobuses para verle jugar.
"A mí no me gustaba mucho el béisbol, pero ya cuando llegó Valenzuela empezó a gustarme.", dijo Ramirez. "Nos veníamos caminando con mi hija chiquita. A veces nos daba marcha y caminando y era bien duro. Pero yo por ver a Valenzuela, no me importaba lo que caminara.
Su esposo, Guillermo Cabezas afirmando que su esposa es una de las aficionadas más grandes de Valenzuela y el equipo.
El que fuera un lanzador trascendental de 19 años - inmigrante de Etchohuaquila, en el estado mexicano de Sonora, e hijo de granjeros - sigue estando muy presente ahora y para las generaciones venideras.
"Él nos alegró porque la gente empezó a enfocarse en Valenzuela. Entonces dije, a donde vamos. Vamos a enfocarnos en el béisbol", dijo Cabezas.
