Una nueva generación está descubriendo los placeres de la música de Mariachi en la escuela.
El Mariachi siempre ha sido una parte fundamental de la cultura hispana y ahora una nueva generación está descubriendo los placeres de la música en la escuela, gracias al crecimiento de programas especializados en música de Mariachi.
En KIPP Sol Academy en Los Ángeles, los espacios en el programa de mariachi son tan codiciados que los estudiantes de secundaria deben participar en un sorteo para ser seleccionados. Hay una lista de espera de más de 100 estudiantes para entrar, dijo la directora de la banda Arlette Morales a "Good Morning America".
Los estudiantes no se refieren a ello como la banda de Mariachi, sino como la familia Mariachi, según Morales.
"Conectarse entre sí a través de la cultura ha derribado el muro que los niños pueden levantar en la escuela, haciéndolos sentir más conectados entre sí y más interesados en la escuela", dijo. "Los padres me dicen que el Mariachi ayudó a sus hijos a superar el COVID, que afectó mucho a nuestra comunidad, y es la razón por la que ahora sobresalen académicamente".
Morales dijo que la música también ha sido fundamental para ayudar a sus alumnos a conectarse con su cultura.
"Esta banda, que está tan conectada con la cultura y la herencia de los estudiantes, ha demostrado que si los estudiantes se sienten plenamente vistos por quienes son y se les motiva a conectarse con su herencia, prosperarán", dijo Morales.
"Mi vocalista principal, Génesis Trinidad, ella no habla español y su abuelo toca el género norteño, así que ver cómo se fortalece su relación... me recuerda a mi relación con mi abuelo".
Génesis, una estudiante de séptimo grado, agregó: "Todos los días me emociona venir a la escuela gracias al Mariachi. Cuando comencé con el Mariachi, mi amor por la música se expandió como 10 veces más".
Jon Bridges, director del Mariachi del Sol de Springfield High School en Oregón, también ha visto crecer el programa de Mariachi de su escuela en los últimos siete años.
"En las primeras semanas de clases, estudiantes se me acercaban y decían: '¡Eres el director del Mariachi! ¿Cómo puedo inscribirme? ¡No puedo esperar a estar en el Mariachi!'" dijo Bridges.
Agregó que el programa ha ayudado a los jóvenes, especialmente tras la pandemia, a aprender cómo volver a participar y fomentar un sentido de comunidad, propósito y fortaleza.
El Mariachi Las Aguilitas de la escuela Davis Elementary en Tucson, Arizona, un programa extraescolar, se creó hace más de 30 años y desde entonces lo dirige la familia Valenzuela.
"Se ven muchos mariachis adultos. No se ven mariachis jóvenes ni mariachis de primaria. Es muy raro", dijo Jaime Valenzuela, actual director de mariachis de la escuela.
Para celebrar el Mes de la Herencia Hispana y Latinoamericana, "Good Morning America" presentó tres programas escolares de Mariachi que unen a sus comunidades.
Mariachi Las Aguilitas de Davis Bilingual Elementary School es un grupo de Mariachi K-5. Fundado en 1985 por un pequeño grupo de guitarristas llamado Los Guitarristas, el grupo ha crecido desde entonces a 65 miembros, lo que lo convierte en uno de los mariachis de escuela primaria más grandes del país. Actualmente, la escuela recauda fondos para uniformes, instrumentos y ayuda para llevar a sus estudiantes a conferencias y otras actividades.
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Después de que el ex director de la banda de música de Springfield High School fuera testigo del impacto que tuvo la banda de Mariachi de un distrito escolar cercano en un grupo de estudiantes, el director colaboró con los programas musicales y multiculturales de la escuela y creó el Mariachi del Sol.
Desde su creación en 2008, el grupo ha crecido hasta contar con más de 80 estudiantes y actúa en toda la región y en múltiples competiciones. Actualmente, el Mariachi del Sol recauda fondos para comprar uniformes nuevos y financiar un viaje a Washington, D.C., para actuar en el Desfile del Día de los Caídos de 2024.
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La banda de Mariachi de KIPP Sol Academy inicialmente comenzó con solo unos pocos estudiantes, pero como dijo el director de la banda, Morales, ahora tiene una lista de espera de más de 100 estudiantes. Con sede en el Este de Los Ángeles, donde la cultura del Mariachi es un elemento fundamental, la banda ayuda a los estudiantes a conectarse con sus raíces y establecer vínculos con miembros de la familia de distintas generaciones.
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